Tarde de fotos en La Laguna: preboda de Gara y Néstor.
Hola familia! Hace unos días realicé una sesión preboda muy especial en la ciudad de La Laguna. Sin duda es de mis lugares preferidos para pasear y disfrutar del magnífico ambiente de sus calles.
Gara y Néstor se casan este año y han querido que yo sea el encargado de inmortalizar este momento tan importante y especial para ellos.
Han decidido que su sesión preboda coincida con el anuncio oficial de su enlace y con el primer cumpleaños de su hijo. Así que aprovecho estas líneas para anunciar a los cuatro vientos que:
-¡Gara y Néstor se casan!-
No cabe duda que son una pareja encantadora, y no solo por lo que desprenden en las fotos de esta sesión. Desde el primer instante te sientes muy cómodo con ellos, te sientes como si los conocieras de toda la vida. Este encanto se intuye fácilmente desde el primer diálogo, cuando sale a la luz su personalidad; una mezcla de sencillez, naturalidad y cercanía. Pienso que esta receta es esencial para cualquier relación entre personas, de ahí que exista gente con las que sintonizas desde el primer momento.
Esta buena conexión se traduce en buen rollo en todos los sentidos y, más concretamente para dejarse fotografiar. Buen rollo significa que una sesión de fotos metódica y rutinaria se transforme en toda una experiencia positiva, pero no solo para mí, sino para ellos que son los que tienen que estar delante de la cámara. En un reportaje de este tipo no solo basta buscar un lugar bonito con una buena luz, la predisposición a ser fotografiados es tanto o más importante. Y cuando hay buen rollo esta predisposición sale por sí sola.
Momentos inolvidables
Empezamos la tarde con una mini-sesión privada en los jardines de su casa, ya que su hijo merecía un homenaje de primer cumpleaños, rodeado de sus padres, de su abuela, de su madrina y también de su perro. Creo que este ratito va a ser inolvidable para sus padres, ya que su pequeño decidió que era el momento ideal para lucirse y demostrar que él ya sabe dar sus primeros pasitos. Y lo mejor de todo es que ¡lo van a tener documentado para siempre!
Como me gustan estos instantes, momentos que hacen que todo cobre un significado maravilloso.
De paseo por calles patrimonio de todos
Dejamos al peque con su abuela y nos fuimos a callejear por La Laguna. Nos dejamos llevar por los rincones históricos de una ciudad patrimonio de la humanidad.
Sus calles peatonales son un gusto para la fotografía urbana. Pero también sus encantadores rincones y la gran variedad de locales que te puedas encontrar. La sesión de fotos fluía por sí sola, e invitaba a disfrutar de todo lo que nos rodeaba.
De ahí que termináramos brindando por una tarde especial, por gente encantadora, por el buen rollo y como no, acabamos brindando por el amor.
-¡Que viva el amor!-